En Residencia Fonseca le damos mucha importancia a la estimulación y hacemos
ejercicios diarios que ayudan a nuestros residentes a tener unas capacidades mucho
mejores.
No solo en este post te explicamos sus ventajas, sino que en próximos post te daremos
todas las claves y te mostraremos que hacemos en Residencia Fonseca con total
transparencia.
Cuatro métodos de estimulación cognitiva para nuestros mayores
Siempre es necesario mantener la mente “en forma” y, más aún, a partir de una
determinada edad. Resulta imprescindible para prevenir la pérdida de capacidades y
así mantener nuestra calidad de vida y nuestra independencia.
El deterioro cognitivo es un desgate progresivo de facultades como la memoria,
atención, cálculo, razonamiento, orientación y percepción del espacio tiempo. Para
prevenirlo, la terapia ocupacional emplea diferentes métodos para estimular a las
personas mayores, con objetivos de prevención y rehabilitación de dolencias que
puedan surgir, tanto de carácter temporal como permanente.
La estimulación cognitiva no sólo mejora nuestra capacidad mental, también favorece
la socialización y la creación de lazos de amistad entre las personas mayores al
interactuar durante de los talleres de actividades.
En primer lugar, nuestros expertos realizan una evaluación inicial. Sobre esa base, se
define el programa de trabajo y, durante su desarrollo, se realiza una evaluación
constante de los resultados para adaptar las diversas actividades de
psicoestimulación, psicomotricidad y destreza manipulativa. Este proceso se realiza
junto con el equipo de psicología, para que los grupos de actividades y los ejercicios
respondan al diseño más más adecuado.
1 — Método tradicional:
Consiste en trabajar de forma individual con cada persona mediante fichas de papel y
lápiz para que realicen ejercicios de escritura, cálculo, dibujo o cualquier otro que
permita trabajar su capacidad de lecto-escritura. Estos ejercicios están dirigidos a
personas con un estado cognitivo normal o, en su caso, con deterioro muy leve o
moderado. En estos casos, el objetivo es prevenir el deterioro cognitivo y mantener los
niveles de destreza, funcionalidad y agilidad mental.
2 — Método manipulativo:
Cuando por motivos físicos, como temblores o rigidez de las manos, o psíquicos no
resulta posible trabajar los ejercicios tradicionales, podemos introducir otros
materiales de trabajo como puzles, lectofotos o figuras fondo. Además, también se
pueden elaborar algunos materiales propios utilizando imágenes de revistas, pinzas o
tapones. De este modo, es posible fortalecer la destreza manipulativa, esencial en la
vida cotidiana. Este método se puede trabajar a nivel individual o colectivo.
3 — Método oral:
Se aplica para personas que padecen un déficit importante de las capacidades
manipulativas o visuales necesarias para realizar los ejercicios anteriores, bien por la
edad o bien por dolencias propias. En estos casos, pasamos a trabajar con la voz. A
diferencia de los métodos anteriores, esta técnica requiere un trabajo en grupos que
sean lo más homogéneos posible para que las actividades cubran las necesidades de
todos los participantes. El abanico de talleres que se realizan empleando el método
oral es muy amplio. Por ejemplo, para trabajar la memoria a corto plazo puede
preguntarse a los participantes por historias que acabamos de relatar; mientras que,
para estimular la memoria a largo plazo, podemos recitar el inicio de refranes
populares para que sean ellos quienes completen la parte final. Otra de las muchas
actividades que pueden realizarse son las rondas de cálculo.
4 — Método digital:
Las tecnologías nos ofrecen numerosas posibilidades para estimular a nivel cognitivo a
las personas mayores. En Residencia Fonseca utilizamos Tablets con Apps
especializadas.